Bienvenidos

Aquí hay un poco de todo. No será un lugar demasiado original ni distinto, pero acaso si lo suficientemente entretenido como para que tengan ganas de volver.

7 de noviembre de 2015

Microrelatos de aquí, de allá, de acullá

Circulan por la red, no se sabe bien de sus autores, integran la galería de mitos y leyendas urbanas. Estos enanos ya son un clásico.

 Bebé
No hay nada como escuchar a un bebé reír, a no ser que sean las 2 a.m y estés solo en casa.

Carro
Ser el primero en responder a un accidente automovilístico es lo más traumático que he visto como oficial de policía; Pero hoy, cuando el cuerpo aplastado de un niño muerto atado al asiento del coche abrió los ojos y se rió de mi cuando traté de sacarlo, supe inmediatamente que seria mi último día en la fuerza.

Durmiendo
Había una foto mia, mientras dormia, en mi teléfono. Yo no la tomé...y vivo solo.

Enterrado
No puedo moverme, ni respirar, ni hablar o escuchar, y es tan oscuro todo el tiempo. Si tan solo hubiese sabido que seria tan solitario, hubiese pedido mejor que me cremen.

Hermanita
Mi hermanita dice que mamá la mató. Mamá dice que no tengo ninguna hermanita.

Interruptor
Llegas a casa, después de un largo y agotador día de trabajo. Te acercas al interruptor para apagar la luz, pero te das cuenta que ya hay una mano ahí.

Intruso
Mi esposa me despertó ayer en la noche para decirme que habia un intruso en nuestra casa. Ella fue asesinada hace 2 años...por un intruso.

Niña
Mi hija no deja de llorar y gritar en medio de la noche. La he visitado en el cementerio para pedirle que se detenga, pero no lo hace.

Respiro
Ella me preguntó porqué estaba respirando tan fuerte en su oído. Yo no lo estaba haciendo.

Sueño
Lo último que vi fue mi despertador a las 2:07 a.m antes de que ella pusiera sus uñas podridas en mi cuello, y su otra mano en mi boca para amortiguar mis gritos. Me senté de golpe, aliviado de que era solo un sueño, pero vi mi despertador y eran las 2:06 a.m. Escuché la puerta de mi ropero abrirse...


Te amo
- Te amo
- Yo tambien
- ¿Qué es lo que más desearías?
- Que estuvieras vivo...

Espíritus
Me reconforta la luz apagada, porque así no puedo ver a los espíritus que habitualmente divagan por toda la casa...

Algo
Mi gato mira fijamente algo...lo sigue con la mirada, está aterrado, luego voltea y me mira fijamente a mi. Retrocede...está aterrado... ¡Quitenmelo! ¡¿Qué es esto?!

Pesadilla
Siempre tengo la misma pesadilla, veo como estoy dentro de un ataud, vivo sin poder moverme...es muy desesperante. Pero al cabo de un rato despierto, solo que esta vez, llevo días tratando de despertar...

Un vestido
Siempre quise usar un vestido de novia frente al altar...pero no dentro de este ataud.

Siempre
Mi hermana siempre me cuenta antes de dormir lo que sintió cuando la enterraron...

Ella
¡No la odiaba! ¡Ella era el amor de mi vida! Ellos me obligaron a cortar su cuello y beber su sangre.  Era ella o mis tres hijos, y tuve que elegir...Usted hubiera hecho lo mismo.

Cadáver
Me dicen que me olvide de él, pero es difícil cuando todas las noches veo a su cadáver dormido en mi cama...

Alguién
Trato desesperadamente de que alguien me escuche...y converse conmigo.  Me encuentro muy solo...pero solo he conseguido que traigan a un sacerdote para que me expulse de mi propia casa.

Arañazos
Creciendo con perros y gatos, me acostumbré a los arañazos en mi puerta mientras dormía. Ahora que vivo solo, es mucho más perturbador.

La heladera
Tuvo una horrible pesadilla. Soñó que en su heladera había once cabezas de mujeres. Cuando despertó, lo primero que hizo fue correr hacia la heladera. La abrió. No había once cabezas, sino doce. Soltó entonces un suspiro de alivio: no faltaba ninguna.

Lamida
Como todas las mañanas, el hombre se despertó ante las insistentes lamidas del perro. Pero luego recordó: lo había matado la noche anterior. Abrió los ojos. Su mujer estaba encima de él, y le lamía la cara. El hombre se incorporó a medias. - Amor, ¿Qué rayos...Entonces se dio cuenta: a ella también la había matado.

Delirios de Fama
- Haría lo que fuese por ser famoso. - ¿Incluso vender tu alma al diablo? - Incluso eso. - Yo soy el diablo: acabas de hacer un trato conmigo. Y le inflingió una muerte tan espantosa que al día siguiente su cuerpo desmembrado apareció en las crónicas policiales, y se hizo famoso.

La tabla Ouija
- No debes jugar con esa maldita tabla ouija. Ya te lo he dicho mil veces. Es peligrosa, puede atraer malos espíritus. - Si no fuera por esa tabla, no estarías hablando conmigo, madre.

Sueño placentero
Estaba teniendo un placentero sueño cuando lo que sonó como martillazos me despertó. Luego, apenas pude oir el sordo sonido de tierra cubriendose mi ataúd por sobre mis gritos.

No puedo
"No puedo dormir" - susurró ella metiéndose en la cama conmigo. Me desperté congelado, agarrando el vestido con el que fue enterrada.

Lo juro
En todo el tiempo que he vivido solo en esta casa, juro por Dios que he cerrado más puertas que las que he abierto.

Temor
Luego de un día de trabajo duro, vine a casa para ver a mi novia acunando a nuestro hijo en sus brazos. No supe qué era más aterrador, ver a mi novia asesinada y mi hijo nacido muerto, o saber que alguien entró en mi casa para dejarlos ahí.

El piso de abajo
Una niña oyó a su madre llamándola desde el piso de abajo. Se levantó y se encaminó hacia allí. Llegando a las escaleras, su madre la metió en su habitación y le dijo: "Yo también escuché eso".

Papi
Lo acuesto en la cama y me dice: "Papi, fíjate si hay algo debajo de la cama". Hago lo que pide para tranquilizarlo, y lo veo a él, otro él, debajo de la cama, observándome tembloroso y me susurra: "Papi, hay alguien en mi cama".

Voces
Me desperté oyendo una voz consolando a nuestro bebé por el monitor de bebés. Mientras me acomodo en la cama, mi mano toca a mi esposa, durmiendo junto a mí.

Golpes
Me despiertan sonidos de golpes en vidrio. Al principio pensé que era la ventana hasta que lo vuelvo a oír desde el espejo.


Miedo
- Niña, ¿No te da miedo ir sola por la calle a estas horas?
- Cuando estaba viva, sí.

Enterrado vivo
Estaba teniendo un hermoso sueño, cuando un sonido como un martilleo me despertó. Luego de eso, apenas pude oír el sonido de las paladas de tierra cayendo sobre mi cajón ahogado por mis gritos.

Visitas nocturnas
“No puedo dormir” susurro ella mientras entraba a la cama con migo. Desperté con frio, abrazando el vestido en el cual fue sepultada

Donde estas?
Fue arriba a ver a su bebe dormido. La ventana estaba abierta, y la cuna vacía

Despertar
Nunca, jamás voy a dormir. Pero sigo despertándome

Puertas
En todo el tiempo que he vivido solo, juro por dios que he cerrado las puertas de las que he abierto.

Odio a los gatos
Siempre creí que mi gato tenía un problema con su mirada, siempre me andaba mirando fijo. Eso pensaba, hasta que descubrí que en realidad miraba al espacio vacío justo detrás de mí.

Mentira
Le dije que se pondría bien.
Aquella fue la primera y última vez que le mentí.

El amor
Encontré en ella al amor de mi vida.
Ella nunca lo encontró.

Promesa
Prometió que siempre esperaría por ella.
Ella le hizo mantener su promesa por siempre.

Monstruos
Mamá le prometió a su hija que los monstruos que le atormentaban no eran reales.
Mamá no sabía que papá era el monstruo.

El salto
Finalmente salté.
Luego me arrepentí.

Sueño
Mi dueño no va a despertar.
Mi cuenco de comida lleva mucho tiempo vacío.

Salvando vidas
Me hice técnico de emergencias sanitarias para salvar vidas.
Veinte minutos de reanimación cardiopulmonar sobre el pecho de mi padre me demostraron que aquella idea era solo una mentira.

El monitor
El monitor cardíaco interpretó su canción final.
Cuando paró, no hubo aplausos.

Sin dolor
9 meses de excitación llegaron a su fin.
Ella nunca lloró.

Ecografia
Aún conservo la ecografía.
Alguien a quien nunca conocí.

Olvidos
Hoy conocí a la mujer más bonita del mundo.
Ella dijo que llevábamos casados 34 años.

Anteojos
Me dijeron que si te pones lo lentes de otra persona, podrías ver la muerte de esa persona si te concentrabas lo suficiente. Es verdad, yo me puse los lentes de mi madre y desde entonces mi padre me da miedo.


La casa en el bosque
Un hombre fue de visita a otro pueblo, y para devolverse, tuvo que caminar por el bosque. Como no conocía bien aquellos lugares, se perdió entre la maleza. El hombre estaba muy preocupado porque ya se iba a hacer de noche, entonces, encontró un claro y en él, una casita de madera. Tocó a la casa, pero nadie salió a abrirle; entonces forzó la puerta, resultando esta abierta.
La casa era de un solo cuarto, con extraños retratos de gente que parecía verlo con una horrible mirada; todos los retratos parecían haber sido tomados en ese mismo bosque.
El hombre fue rápido a la cama y se tapó para no ver los retratos que cada vez parecían más estarlo viendo.
A la mañana siguiente, al hombre le dio curiosidad de ver si los retratos se veían igual de feos a la luz del día, pero resultó que en la casa no había ni un solo retrato, sino muchas ventanas al exterior

Las gemelas
Dicen que cuando nacen gemelas lo que le pasa a una le pasa a la otra siempre, esto precisamente es lo que le sucedió a dos chicas gemelas de España.
Eran dos hermanas que se llevaban muy bien, nunca se peleaban indiscutían, pero por razones de trabajo tuvieron que cambiar su residencia a la ciudad, donde estaba la carretera que era peligrosísima en esos momentos.
Las niñas tuvieron que cruzar solas por que a la madre la llamaron del trabajo para que fuera urgentemente, les dijo a las niñas que cruzaran solas pero con cuidado y mirando a los dos lados y las niñas obedecieron.
Nada más girarse la madre para marcharse oyó un golpe muy fuerte detrás suyo, eran sus hijas que habían sido atropelladas por un camión, las dos desgraciadamente habían muerto.
Cuatro años más tarde la madre aún era joven ya que tenía 34 años, todavía vivía en la misma casa cerca de la carretera y no olvidaba ningún día a sus dos gemelas. Sin embargo decidió adoptar 2 gemelas, muy parecidas a las anteriores y así olvidar su perdida.
Pero la fatalidad estuvo a punto de volver a la familia, a pesar de prohibirles expresamente acercarse a la carretera, un día las dos niñas fueron jugando y decidieron cruzar la misma, no venía nadie en ningún sentido, no había peligro, en el último momento apareció su madre y les dijo que no cruzaran muy alterada y chillando, a lo que las niñas respondieron al unísono:
- Si no pensábamos cruzar, ya nos atropellaron una vez y no volverá a ocurrir

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